viernes, 15 de julio de 2011

Ruptura familiar en la alicantina Germaine de Capuccini

Gonzalo Garteiz
La ruptura del bloque accionarial en las empresas familiares, más habitual de lo que generalmente se piensa, con ejemplos recientes de gran impacto mediático, Eulen, Chivite y Gullón, entre otros, se ha cobrado una nueva víctima, la líder de la cosmética profesional, Germaine de Capuccini, con sede en Alcoi. Esta compañía, que sólo vende en salones de belleza y spas, fue fundada por Carmen Vidal en 1964, una mujer nacida en Argelia que pasó años en París donde adquirió un gran conocimiento de la cosmética. Germaine de Capuccini, compañía que muchos piensan que es extranjera, ha destacado siempre por sus modélicas relaciones laborales, a pesar de haber sufrido un ERE en 2009, y cuenta con algo menos de 300 trabajadores y una facturación de 21 millones de euros (un 25% menos de lo que ingresaba antes de que comenzase la crisis).


Tras fallecer en 2003, su hijo Jesús Vidal fue nombrado presidente, ocupando las dos hermanas de éste, Carmen y Rosario, puestos en el consejo, al igual que María Ángeles, heredera del cuarto hermano, ya fallecido, quien ha ocupado diversos cargos en la compañía y es la actual consejera delegada. Los cuatro sucesores, tres hermanos y la sobrina tienen el 75% del capital, repartido en tres partes de un 18% para las mujeres y el 21% de Jesús, quien ha trabajado muchísimos años en la compañía. El 25% restante es propiedad de la firma siria Fine Cosmetics. El conflicto ha surgido cuando Rosario Vidal ha reclamado a su hermano que le compre su participación. y cuando este se negó, ha pedido que sea la empresa, la compradora, lo que le ha sido denegado, con importantes diferencias en la valoración de la compañía entre las partes. La última junta se saldó con la dimisión de Jesús Vidal de la presidencia, lo que podría facilitar un acuerdo con la disidente, y con la imposibilidad de aprobar las cuentas del pasado ejercicio. La Celosía no ha podido hablar con la reclamante, pero sí ha sabido que en agosto debería celebrarse una nueva asamblea de socios para determinar el nuevo consejo de administración y aprobar las cuentas si hay mayoría.


Rosario Vidal, que es también secretaria del consejo, y la vicepresidente, su hermana Carmen, que podría unirse a su hermana en la venta, no tienen sucesores en la empresa, mientras que el dimisionario, tiene un hijo, Raúl Vidal Ruz, que se encarga de la labor comercial y del nuevo proyecto de Germaine que une cosmética y tecnología, Synergyage. Su prima María Ángeles Vidal Masanet es de momento la única consejera ejecutiva desde la dimisión de su tío. Éste fue el artífice de la internacionalización de la compañía, que factura el 60% en el extranjero, con presencia en China, y de la entrada en el mercado de los spas con soporte instrumental tecnológico.


A la espera de cómo se desarrolle la junta de agosto, la disidente Rosario ha conseguido un edicto judicial para celebrar una junta extraordinaria, presidida por ella misma, el 13 de septiembre para censurar la gestión de su hermano y sobrina, e incluso interponer una acción de responsabilidad. Verano caliente en Germaine de Capuccini, que cuenta con un refrescante espacio, enseña de la calidad del grupo, en Madrid enfrente del Retiro.