Gonzalo Garteiz
En un nuevo acto de incongruencia política y de falta de equidad en el reparto de los costes sociales de la crisis, el Gobierno ha aceptado prejubilar a los trabajadores de 55 años de la quebrada Caja del Mediterráneo (CAM) en unas condiciones increíblemente generosas para una entidad que ha tenido que ser rescatada con dinero de todos los contribuyentes, mediante una capitalización de 2.800 millones y una inyección de otros 3.000 millones para dotarla de liquidez.
Los interventores del FROB, instrumento del Gobierno y del Banco de España para rescatar entidades financieras insolventes, se reunieron el lunes con los representantes sindicales para garantizarles que el plan de prejubilaciones previsto cuando se pactó la fusión con otras tres entidades, CajaAstur, Caja Extremadura y Caja Cantabria, abortada en el mes de marzo, no sólo siguiera adelante sino que debía acelerarse, según ha informado 'Cinco Días'.
El citado plan, digno de una minera con yacimientos de oro, pero no de una entidad quebrada, establece que casi 1.000 empleados con 55 años de edad cobren, hasta cumplir los 64 años un mínimo del 90% del salario neto recibido en los doce meses anteriores a la baja. Una parte de la prestación corre a cargo del seguro de desempleo. Además, la caja, o sea el Estado, debe pagar el coste del convenio especial con la Seguridad Social,una vez concluido el período de desempleo y hasta los 64 años. La prejubilación puede cobrarse mediante renta mensual o en forma de capital de una sola vez. Si se opta por la renta mensual, ésta será actualizada con un 1,5% de subida anual. En caso de fallecimiento, la renta mensual la cobrarán sus herederos.
Además, la caja intervenida cubrirá todos los años hasta que el ex empleado cumpla 64 el coste de la aportación al plan de pensiones, en igualdad de condiciones que si el trabajador estuviera en activo. Existe también otra compensación para que los prejubilados no pierdan poder adquisitivo por el año que falta hasta los 65 años reglamentarios. En principio estaba previsto que estas prejubilaciones se realizarían por tercios, en tres años 2011, 2012 y 2013, pero el FROB ha reclamado a los sindicatos que el millar de empleados esté fuera de la caja antes de octubre.
La entidad tenía dotado a 31 de diciembre del año pasado un fondo interno de 147 millones para cubrir estos pagos, cantidad que se antoja claramente insuficiente, ni siquiera llegará al 50% de lo necesario, para que 1.000 prejubilados cobren sin ir al trabajo el 90% de su salario neto anterior a la baja.