Gonzalo Garteiz
Banca Cívica, el banco que han configurado Caja Navarra y Cajasol, con el complemento de Caja Canarias y Caja de Burgos, ha conseguido colocar sin grandes problemas, aunque al precio más bajo, 2,7 euros por acción, de los que había marcado en la oferta, los casi 250 millones de acciones ofrecidas a inversores particulares e institucionales. La determinación del precio se hizo un día después de conocerse el descuento del 14% al que se había visto forzada Bankia, el banco que lideran CajaMadrid y Bancaja, para colocar muy ajustadamente la suya.
Con la ayuda fundamental de Credit Suisse, y un gran trabajo realizado por su red de sucursales, Banca Cívica, ha obtenido una sobredemanda de 2,26 veces en el tramo minorista (2,71 veces en el correspondiente a empleados), una cifra que en el caso de Bankia se redujo a 1,04 veces, casi sin prorrateo. En cuanto al tramo institucional, la demanda ha superado el papel ofrecido en 1,32 veces, cifra que también supera a la del banco presidido por Rodrigo Rato, que fue de 1,10 veces.
El diseño del banco asesor suizo ha sido acertado, ya que amplió mucho la horquilla de precios, un máximo de 3,8 euros y un mínimo de 2,7, que supone un 29% de diferencia, y que le ha permitido fijar finalmente el precio mínimo pero sin el coste de imagen que supone dar un descuento adicional para vencer los reparos de los exigentes inversores. Bankia tuvo que conceder la rebaja, de un 14% sobre el precio más bajo de la horquilla, porque ésta había sido determinada con un margen mucho más estrecho, un 12%.
Banca Cívica, que es una de las diez primeras entidades financieras de España, cotizará con una capitalización próxima a los 1.400 millones, alrededor de 7 veces el beneficio previsto para este año (según el folleto), lo que le deja en una buena posición competidora frente al sector. Su referente inicial debería ser Bankinter, que le aventaja en 500 millones en capitalización.