Gonzalo Garteiz
Isolux se ha visto obligada a salir al rescate de TSolar, la mayor empresa mundial de generación eléctrica fotovoltaica, aportando 88 millones de euros mediante una ampliación de capital y una fusión por absorción. El grupo que preside Luis Delso y dirige Antonio Portela sólo ha sido acompañado en la inyección de fondos por Caja Navarra y CajaSol, ambas integradas en el mismo grupo bancario, Banca Cívica.
T-Solar, ante los intentos fallidos de captar capital en Bolsa, necesitaba imperiosamente una inyección de capital que le permita desarrollarse en el extranjero, dado que en España el sector fotovoltaico está en declive por las limitaciones a las primas impuestas por el Gobierno. Marcial Portela, que fue nombrado en febrero responsable del Santander en Brasil, y el grupo de fundadores también accionistas de Isolux, Luis Delso, José Gomis y Javier Gómez Navarro, entre otros, proponen una ampliación de capital en marzo hasta 96 millones, que más que duplica el número de acciones.
A esta captación de recursos, que se realiza con una prima de emisión de 1,93 euros por cada acción de 50 céntimos (la última suscrita por CajaSol dos años antes se hizo con una prima de 20 veces el nominal) no acuden los fundadores ni tampoco las cajas de Castilla La Mancha, que fue intervenida por el Estado y está bajo control de Cajastur, la cual tenía antes de la ampliación un 10,6% del capital, ni tampoco Caixanova, una de las cajas gallegas, fusionada ahora con Caixa Galicia, con un 6,3% en su poder.
Isolux cubre el equivalente a su participación del 20% y la de Charanne, del 19%, que es de accionistas que controlan la constructora-concesionaria como Luis Delso, José Gomis y Gómez Navarro, entre otros. El grupo de Marcial Portela no suscribe el 18% que le correspondía y tampoco lo hace Cartera Perseidas, una agrupación del banco EBN y diversas cajas, con algo menos del 5%, aunque tiene un 10% de Isolux.
Al quedar sin suscribirse algo más del 40% del capital, se activa una nueva operación, por la cual Isolux, con una sociedad de nueva creación, con un patrimonio equivalente al capital no suscrito en TSolar, casi 52 millones de euros, absorbe a ésta mediante un tipo de canje de uno a uno. La Celosía ha intentado contactar con Isolux y TSolar sin éxito para preguntar las razones de acometer este proceso societario de fusión. Previsiblemente se utiliza estar fórmula para obtener beneficios fiscales.
A la postre, Isolux toma el control del grupo fotovoltaico tras invertir más de 80 millones de euros en estas operaciones, que le permiten tener ahora más del 50% del capital, seguido de Banca Cívica, con cerca del 20%, diluyéndose a la mitad el resto de accionistas. Todas estas operaciones no han sido comunicadas todavía por la compañía, quizá porque todavía faltan nuevos pasos.
A la espera de la nueva reestructuración societaria, también de la propia Isolux ya planificándose, TSolar, presidida por Juan Laso, se ha apuntado un éxito en India, donde ha conseguido asociarse con un inversor local, Astonfield, con el propósito de invertir 400 millones de euros en parques fotovoltaicos, con una potencia de 200 megavatios, para lo cual han conseguido la primera financiación realizada en India bajo la modalidad de proyect finance para un parque fotovoltaico, en la que los bancos indios prestarán el 70% del capital requerido para la inversión, y los socios el 30%.