jueves, 6 de octubre de 2011

Las empresas que cotizan en Bolsa están todavía más endeudadas que a comienzos de la crisis

 
Gonzalo Garteiz
Los últimos datos financieros de las empresas no financieras que cotizan en Bolsa correspondientes al primer semestre de este año, proporcionados por la Comisión Nacional del Mercado de Valores, muestran una inquietante evolución de la deuda, que todavía se mantiene por encima de los niveles precrisis, a consecuencia de la política de la banca acreedora de renovarla a vencimiento en la mayor parte de los casos por la incapacidad de los deudores de pagar sin sufrir un serio quebranto patrimonial malvendiendo activos.

El total agregado asciende a 310.179 millones, por encima de los 301.000 del año 2007 y los 309.600 del ejercicio 2008, cuando se produjo la quiebra de Lehman Brothers. Aunque el total sí ha descendido respecto al último ejercicio, un 5,1%, no ha ocurrido los mismo en términos relativos, en concreto respecto al patrimonio y en relación al beneficio de explotación. En ambos casos, el pasado semestre los ratios eran peores que a finales de 2010. De una décima, 1,5 frente a 1,4, en el caso (apalancamiento) del patrimonio soportado con deuda, y de dos décimas, 4-3,8, si se tiene en consideración el ebitda.


El nivel de deuda se ha deteriorado aún más si se tiene en cuenta el empeoramiento de los indicadores de la carga financiera soportada por las entidades que cotizan en Bolsa, habiéndose reducido la ratio EBIT/carga financiera desde 3,1 veces a finales de 2010 a los 2,6 de junio de este año. Además, con el agravante de que este deterioro se produjo en todos los sectores.
En cualquier caso, la presión de los mercados y la imposibilidad de las entidades financieras de mantener eternamente esta situación forzó el año pasado un aumento de las ampliaciones de capital, que continúa este año, aunque con cifras relativamente modestas. En los tres primeros trimestres, las empresas han captado por esta vía alrededor de 11.000 millones a los que hay que añadir otros 3.700 mediante suscripción con oferta pública. Gran parte de estas capitalizaciones corresponden a Bankia y Banca Cívica. En número, las 63 habidas hasta septiembre se acercan a las 67 del año pasado, siendo 13 de ellas liberadas.


Las recientes capitalizaciones anunciadas esta semana por Abengoa y Prisa son un claro reflejo de los requerimientos del mercado, que ya no acepta por más tiempo que las empresas mantengan una estrategia de que la deuda no hay que devolverla mientras se paguen los intereses. La banca acreedora es la primera que necesita más liquidez y más recursos propios por la nueva regulación, entre otras razones. El desapalancamiento de las cotizadas parece que será a partir de ahora cuando comience de veras. Los accionistas deben estar preparados para rascarse el bolsillo aunque no sean buenos momentos para la Bolsa, ya que los niveles de endeudamiento son insostenibles.
La suma de la deuda de los hogares, empresas y Estado representa en España el 355% del PIB, según datos de 2010 del Banco de Pagos Internacionales, siendo el segundo país de Europa con más carga, tras Portugal, y el tercero del mundo, donde Japón ocupa el primer lugar.