Gonzalo Garteiz
La decisión de prorrogar hasta el 30 de septiembre la prohibición de la venta de acciones de entidades financieras a descubierto (sin la posesión de los títulos), tomada por los reguladores de las Bolsas de los países más afectados, Italia, España, Portugal y Francia, no asustará en demasía a los especuladores, teniendo en cuenta los resultados habidos en las anteriores dos semanas de prohibición. Al menos en el caso español. Un estudio propio sobre las posiciones netas de préstamo de valores de las entidades afectadas (excluyendo Renta 4 y las cuotas participativas de la CAM, por ser cifras insignificantes) durante ese primer plazo de prohibición muestra un descenso de apenas el 10% en el total, y este porcentaje está distorsionado por el Banco Santander, que con casi la mitad del total de los títulos prestados, es la única entidad, junto a Caixabank, sobre la que la menor presión especulativa es evidente, con una caída del 18%, en los ocho jornadas bursátiles tras la prohibición.
El banco de La Caixa ha visto reducida aquella en más del 20%, pero su saldo de títulos cedidos a la especulación es muy bajo, 32 millones, con una reducción de 7,6 millones de acciones prestadas, por lo que la lectura debe ser diferente.El banco cántabro ha pasado en ese periodo de cuarentena de tener un saldo de 1.009 millones de títulos prestados a otro de 826 millones, mientras que el otro banco internacional español, BBVA, ha visto aumentar esta partida, de 538 a 550 millones de títulos.
Todos los datos se refieren a las comunicaciones realizadas a Iberclear, la cámara encargada de compensar y liquidar los valores que cotizan en España.El préstamo de valores es la principal herramienta que utilizan los especuladores a corto, short sellers, como vía de arbitraje de sus posiciones de venta, por lo que su evolución es significativa para comprobar la efectividad de las medidas tomadas.
Bolsas y Mercados Españoles, que incomprensiblemente entró en el grupo de entidades financieras y aseguradoras protegidas de esta operativa, BBVA, Banca Cívica, Caixa y Banco de Valencia, cotizan a niveles inferiores desde que se tomó la controvertida decisión, sin previo aviso, a pesar de que el Ibex remontó desde entonces el 1,5%, y casi un 2,5% el índice de los valores financieros.El banco vasco y las dos aseguradoras, Catalana de Occidente y Mapfre, son las únicas entidades que mostraron un ligero repunte en el saldo neto de préstamo de valores.
Un elemento destacable del estudio realizado por La Celosía es el elevado porcentaje de títulos prestados sobre el total de admitidos a cotización.
Así, en el caso del Santander suponían el 12% del total de acciones, porcentaje que ha disminuido ahora dos puntos. En el BBVA alcanza el 13%, y similar cuantía a la de los dos grandes bancos registra sorprendentemente Bolsas y Mercados. El récord lo ostenta sin embargo el Sabadell, con casi un 15% de sus títulos en préstamo.Bankia, recién estrenado en Bolsa, y del que se soltaron, mediante cancelación de contratos, un lastre de 44 millones de títulos prestados cuando terminó la fase de estabilización del valor, mantenía todavía un saldo de 57 millones de títulos, más de un 3% de los emitidos, lo que no deja de ser inquietante. Otro apunte interesante es la asuencia de especulación en el Pastor, que apenas cuenta con títulos cedidos.