La primera huelga general contra el Gobierno del PSOE que encabeza José Luis Rodríguez Zapatero, que tuvo lugar el 28 de septiembre del pasado año, fue calificada de éxito rotundo por Comisiones Obreras y UGT, los dos sindicatos con mayor representación en el conjunto de las empresas españolas. Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, los líderes de estos sindicato, como es habitual en estas ocasiones, inflaron las cifras de seguimiento de la huelga hasta valores increíbles, un 70% de media, y en el caso concreto de la industria química ese porcentaje subía hasta el 80%.
Sin embargo, en la mayor empresa que controlan, Repsol, la realidad ha sido muy diferente, el mayor grupo químico del país ha confirmado a La Celosía que solamente el 9,79% de los cerca de 16.000 empleados de su plantilla en España secundó el paro. Esta cifra es indiscutible oficialmente porque secundar la huelga conlleva no cobrar el salario de esa jornada, y la empresa tiene el registro contable de las nóminas. Comisiones y UGT son los sindicatos mayoritarios en el grupo Repsol, de hecho son los únicos firmantes en los convenios de Repsol Química y Repsol Petróleo, mientras que en Repsol Comercial les acompaña un organización propia para el grupo, STR, y en Repsol YPF también firma los acuerdos laborales el representante de la Confederación de Cuadros y Profesionales (CCP).
Para hacerse una idea de la falta de autoridad moral de los sindicalistas del grupo petrolero, basta señalar que la propia patronal, que también barre para casa en las cifras, reconoció un seguimiento cinco veces mayor en las grandes industrias del metal, del 50%. Los convenios colectivos de la compañía que preside Antonio Brufau están entre los más favorables para los trabajadores. El ejercicio pasado, el mismo en el que tuvo lugar la citada sexta huelga general de la democracia, en este caso en contra de la reforma laboral del Gobierno de Zapatero, el gasto de personal del grupo Repsol aumentó el 15%, cuando un año antes esta partida sólo se incrementó el 3%, y la plantilla había aumentado en mayor medida en términos relativos. La empresa justifica principalmente esta subida de gran calado en la entrada en vigor de los nuevos convenios y los gastos de personal.